Familiarícese con el problema, y defínalo de la mejor manera posible. Bill Stumpf reprodujo este mantra en cada proyecto que emprendió para Herman Miller, pero quizá nunca de manera más íntegra que con la revolucionaria silla Aeron. Trabajando con Don Chadwich, Stumpf comenzó su trabajo de creación de una silla consultando a las personas que pasan mucho tiempo en sus sillas, personas mayores en hogares de jubilados. Tomaron ese conocimiento y lo aplicaron a la sillería de trabajo. De esta manera, comenzaron una revolución en la ergonomía.
Aeron desafió prácticamente cualquier convención sobre las sillas de oficina gracias a su ventilación, su tamaño integrador, el soporte para las movimientos naturales del cuerpo al sentarse y un diseño respetuoso del medio ambiente. No estaba tapizada. No tenía rellenos. Y las ideas de los diseñadores sobre lo que denominaron un trabajo de “rendimiento cruzado”, una combinación de tareas de alta intensidad e interacción casual, anticiparon la realidad de los lugares de trabajo actuales, donde la tecnología y los aspectos sociales del trabajo están cada vez más entrelazados.
Cada material, cada mecanismo de Aeron anticipa el arte y la ciencia de la sillería. Aeron es la primera silla para oficinas en la que la tela y la espuma fueron reemplazadas por una membrana tejida de suspensión respirable. Aeron distribuye el peso de manera uniforme, eliminando los puntos de presión y la acumulación del calor.
Stumpf y Chadwich llegaron a la conclusión de que, funcionalmente, la silla debía acompañar los movimientos de los usuarios de la manera más natural y simple posible. La reclinación Kinemat de Aeron permitió que esta idea se convirtiera en realidad. El mecanismo patentado permite que los usuarios se reclinen fluidamente, a medida que su cuerpo rota naturalmente a la altura de las caderas, las rodillas y los tobillos.
PostureFit realizó una incorporación modesta, pero a su vez fundamental al diseño original de Aeron, ya que soporta de manera adecuada la base de su columna vertebral, o la región sacra, para que la pelvis conserve una reclinación natural hacia adelante, evitando que usted se siente con los hombros caídos y manteniendo su columna alineada.
La funcionalidad de Aeron es clara y contribuye a brindar un aspecto distintivo que lo invita a sentarse y a experimentar la silla por su propia cuenta. Desde la transparencia del material del sistema de suspensión Pellicle hasta la curvilinearidad de la silla, Aeron fue diseñada en torno a las personas, creando una estética propia. No es de sorprender que sea parte de la colección permanente del Museo de Arte Moderno de Nueva York, incluso desde antes de que se vendiera la primera silla.
La selección de materiales sofisticados y los dibujos del tejido Pellicle (Classic, Tuxedo y Waves), disponibles en una opción de tonos neutros de claro a oscuro, permiten que la silla se adapte perfectamente a diversos gustos y entornos.
El diseño innovador y el rendimiento de la silla Aeron se extienden a una familia de sillería completa que incluye sillas altas de trabajo y sillas simples.
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