Se cumplen 20 años del nacimiento del sacacorchos ANNA G. diseñado por Alessandro Mendini en 1994, y que se ha convertido en un icono de la compañía italiana ALESSI.
Hoy, dos décadas después, Mendini celebra este acontecimiento. Exhibe la clásica silueta de una mujer, sin embargo, la variación principal se encuentra en el rostro, o mejor dicho, la base de la pieza, pues ésta es una especie de jeroglífico metálico con expresiones de colores.
Alessandro Mendini, fundador del estudio Ghion-Nadeau, sus diseños han sido tan novedosos que además de Alessi, prestigiosas marcas como Dior, Campari, Capellini, Yves Saint Laurent y Poltrona Frau, por mencionar algunos, lo han invitado a colaborar. Así mismo, muchas de sus obras forman parte de las colecciones permanentes del Guggenheim Museum de Nueva York y del mismo Pompidou.
Pocos saben que el nombre del sacacorchos Anna G. deriva del nombre de una persona real: Anna Gili, diseñadora de Umbria, Italia. “Al comienzo del proyecto, recordé cuando de chico mi abuela abría la botella del vino en la mesa; me pareció siempre una bella performance, una especie de baile ritual: la cabeza que gira, los brazos que se levantan y se bajan, el sonido del corcho que sale de la botella. Decidí entonces un objeto antropomorfo. Diseñé una bailarina, un objeto femenino. Pero es evidente que por vía subliminal, había hecho el retrato de Anna; ella fue siempre la inspiración”, explica Mendini.
El increíble éxito de Anna G., con 1,5 millones de unidades vendidas, se ha convertido en un éxito de ventas que a lo largo de los años ha dado lugar a una pequeña familia de objetos, incluyendo un molino de pimienta, tapones de botellas, rallador, candelabro y un jarrón, a nombre de unos pocos. “Vestí a Anna G. con una máscara para danza tribal, quizás acorde a los bosques y a las leyendas de Umbria, tal vez, adaptada a los teatros de la Bauhaus. Una nueva performance dedicada”, señala el diseñador.
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